Cada vez más personas eligen a un gato como animal de compañía, pero la verdad es que aún hay mucho desconocimiento sobre su naturaleza y sus necesidades, lo que nos lleva a darles, involuntaria o inconscientemente, cuidados inadecuados. ¿Cómo hacer feliz al gato? Sigue estas recomendaciones básicas y con seguridad, le procurarás mucho bienestar.

1. Comprende y respeta la naturaleza y personalidad de tu gato

Aunque el gato de hoy es capaz de responder a un nombre, interactuar y convivir con otros animalitos, acoplarse a nuestras rutinas y mucho más, en su esencia permanece un felino explorador, cazador y territorial, que de acuerdo a sus experiencias tempranas, será más o menos sociable, tímido, miedoso, juguetón, mimoso… 

Comprender que tu gato es gato y no niño ni perro, sino gato con una personalidad única como todo individuo, es vital para aprender a respetar sus condiciones y ritmos, de modo que podamos entender por ejemplo, que el gato no funciona por obediencia como el perro sino por negociación, que jamás debemos obligarlo a algo que no quiera en especial si tiene miedo, sino respetar sus espacios y privacidad, es fundamental para que un gato sea feliz.

2. Alimenta bien a tu gato

Los expertos en nutrición animal aseguran que darle la mejor comida a un gato, nos puede ahorrar muchas visitas al veterinario pero, ¿cómo saber cuál es el alimento más conveniente para tu gato? Depende de su raza, edad, peso, estilo de vida y necesidades energéticas, cada gato tiene distintos requerimientos nutricionales. También influye mucho su condición física y salud general, hay gatos con problemas de estreñimiento que requieren más fibra en su alimentación, otros padecen flatulencias cuando su dieta es alta en carbohidratos, así que es adecuado preguntarle al médico veterinario qué alimentación le conviene más porque no toda comida para gatos es adecuada para el tuyo.

3. Ofrécele a tu gato un ambiente limpio y tranquilo

La higiene es esencial en la vida de todo felino y esto fácilmente lo puedes comprobar si te fijas en la cantidad de tiempo que pasa tu gato acicalándose diariamente e incluso en ocasiones, acicalando a otros. Al gato le causa estrés sentirse sucio y percibir sucio y desordenado su entorno. Ayúdalo a estar feliz cepillando su pelo con frecuencia y manteniendo su arenero muy limpio diariamente.

4. Al gato le encanta el agua fresca

La mayoría de los gatos no son muy buenos tomadores de agua sin embargo necesitan mantenerse muy bien hidratados pues de esto depende en gran medida el funcionamiento adecuado de sus riñones. Cambiar el agua de tu gato varias veces al día por agua fresca, poner un cubito de hielo al agua en días calurosos o usar fuentes eléctricas les fascina.

5. Enriquece el entorno de tu gato para que lleve vida de gato

Ya lo decíamos al comienzo, el gato es curioso, cazador y territorial por naturaleza, y necesita expresar con libertad y confianza estos instintos para mantenerse bien emocional, mental y físicamente. 

Para desarrollar su territorialidad necesita elementos suficientes para rasguñar y marcar. Para desarrollar su instinto de exploración y caza necesita tener en qué trepar, saltar, esconderse, atrapar. Cuando no cuenta con los elementos adecuados para esto, comienzan las conductas indeseadas como la destructividad o los problemas derivados de la frustración y el aburrimiento. 

Dedica unos minutos diarios de atención y juego con tu gato, ofrécele pequeñas novedades que estimulen cada día su mente, olfato, vista, oído, ponle retos como dificultad para sacar un snack atrapado en algo y regálale su propio mobiliario, porque al igual que tu cama, tu comedor o sofá, tu gato necesita unos mueblecitos a su medida. en Mirringa Mirronga te ayudamos a diseñar el mobiliario más adecuados para tu gato, integrándolo con estética al estilo de tu hogar, contáctanos para recibir asesoría.

Escrito por:

Ana Gallo. Etóloga U del CES.