Dejar o no salir de casa al gato es una decisión que repercute tanto en la calidad como en la expectativa de vida del bigotudo, ¿cómo así?

Ventajas de acceder al exterior

Por su naturaleza felina, un ambiente al aire libre reúne muchas condiciones que favorecen al gato, ya que le ofrece experiencias muy estimulantes como poder trepar árboles, subirse a los tejados, esconderse entre los arbustos y cazar, pero al mismo tiempo el exterior está lleno de amenazas para él.

Peligros en el exterior

Un gato que pasa largas horas al aire libre está expuesto a contagiarse de enfermedades como la leucemia felina, el virus de inmunodeficiencia felina, peritonitis infecciosa y rabia, entre otras. 

Parásitos como pulgas, garrapatas y gusanos también atacan frecuentemente al gato que vive mucho tiempo en el exterior, transportando esos parásitos a casa y aumentando el riesgo de transmitir enfermedades a los humanos.

¿Mejor en interior?

La razón más poderosa que nos impulsa a tener los gatos “encerraditos” es la posibilidad de aumentar su expectativa de vida: un gato que vive al aire libre se estima que viva entre 3 y 5 años, mientras que un gato que vive en interior puede vivir hasta 14 años y más.

Y aunque en casa no podemos eliminar en un 100% los riesgos como contraer una enfermedad mortal, por lo menos si podemos brindarles de forma permanente alimentación apta y de calidad, cama y abrigo seguro, atención médica cuando lo requiera, juego y mucho amor.

Por eso es importante que consideres, si tu gato cuenta con la posibilidad de salir al exterior, te recomendamos:

• Que sea bajo tu vigilancia y control.
• Preferiblemente con collar y medalla con sus datos básicos.
• Procura que tu gato esté esterilizado y tenga sus vacunas y antiparasitantes al día.
• Y si por algún infortunio tu gato no tiene uñas (crueldad que no apoyamos), por nada del mundo lo dejes salir al exterior, pues no tendrá como defenderse.

Escrito por:

Ana Gallo. Etóloga